La verdadera libertad significa escoger reaccionar de una manera positiva a lo que está pasando , asegurándonos que el comportamiento leído es virtuoso y que nos aportará la clase de experiencias futuras que nos gustaría tener.
Reconocemos que el sufrimiento procede de acciones negativas y que la felicidad procede de acciones positivas. Depende de nosotros elegir la opción correcta. Por ejemplo: si alguien se comporta agresivamente con nosotros, es posible que se deba a que el karma acumulado haya madurado y no podemos impedir que se manifieste. Si escogemos reaccionar de manera agresiva, solo servirá para perpetuar la misma situación. Si practicamos la paciencia y la bondad hacia el agresor , estamos creando las causas de nuestra felicidad futura; estamos eligiendo la opción correcta. Eso es libertad de acción.
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